Frío en la mañana,
calor en mi corazón.
De nuevo a mi lado pasas,
se me seca la garganta.
Se me para el cuerpo.
Detenido el tiempo,
el brillo de tu pelo,
del color del amanecer,
me ciega hasta el alma
que tus ojos quiere ver.
Y el cielo ya no existe,
está en tu mirar.
Que me llevan a un oasis
en el que con tu cuerpo
quiero jugar.
Pero hoy tampoco me miras,
no eres consciente de mi existencia.
Sigo esperando que me veas,
nos miremos,
y paremos la Tierra.
calor en mi corazón.
De nuevo a mi lado pasas,
se me seca la garganta.
Se me para el cuerpo.
Detenido el tiempo,
el brillo de tu pelo,
del color del amanecer,
me ciega hasta el alma
que tus ojos quiere ver.
Y el cielo ya no existe,
está en tu mirar.
Que me llevan a un oasis
en el que con tu cuerpo
quiero jugar.
Pero hoy tampoco me miras,
no eres consciente de mi existencia.
Sigo esperando que me veas,
nos miremos,
y paremos la Tierra.