jueves, 25 de diciembre de 2014

Loa a mi cuerpo

Me hago una alabanza
de desesperanza,
con la certeza de saber
que tras la muerte no hay nada.
Me rindo a mi cuerpo,
contenedor inerte
de una vida sin suerte
que acabará en la muerte.

En una crisis de identidad,
y para saber quién era,
a mi cuerpo puse marca
llenándolo de barreras.
Como una celda enjaulada,
prisión de números y letras,
me aseguré de que soy nadie,
y no hacen falta etiquetas.

Escarmentado de la traición,
y con una daga en la mano,
atravesé mi corazón,
negro y blanco, envenenado.
Con dos reptiles engarzados,
que no caerán de por vida,
y que caiga la piel a tiras,
que mi cuerpo está curado.

Pensando en el azar,
con la mano de lanzarlos,
grabé con sangre y con fuego
en mi brazo un par de dados.
Que no es que crea en la suerte,
sino fiel al devenir.
Que en esta vida todo puede pasar,
y a veces, todo puede ocurrir.

Y sigo dejando mi sangre
Por ahí tirada,
Como si no me importara.
Y no me importa:
Nadie, nunca, NADA.

Invitado de la muerte
A un gran baile.
Invitado sin suerte,
Intentando ser alguien:
Nunca, nada, NADIE.

Me conduce derecho
Hacia la tumba.
Por mil manos cavada
Para cuando mi cuerpo sucumba:
Nada, nadie, NUNCA.

Con aquella que me parió
y mi mejor amiga, mi hermana,
en infinito nos convertimos
una fría mañana. 

Y una leyenda que durará eternamente.
Porque Ohana significa familia
y familia, que estaremos juntos siempre.

lunes, 31 de marzo de 2014

Nana del alma



He estado donde solíamos jugar
y hoy comprendo que no te has ido,
que sigues viva aunque ya no estás,
que estás presente aunque no conmigo.

Saliste indemne de un mal pasado
que alguna mala persona te brindó
y la inconsciencia te llevó a mi lado,
dulces momentos entre los dos.

Hoy vives presente en mi memoria
porque el tiempo aún no te borró
y aunque haya alguien donde estuviste
no es tu lugar el que ocupó.

Porque esa estancia, aunque pequeña,
sigue estando bien escondida,
cuando me acuerdo abro su puerta
y no has cambiado ni una pizca.

Tú seguro no me recuerdas
sin un olor que me retrate,
tu memoria será niebla,
más tus sueños… ¿Quién sabe?

Y si tuvieras consciencia te diría
que sigas siendo guardiana,
como aprendimos aquellos días,
como tu naturaleza te manda.

Y si tuvieras conciencia te diría
que formas parte de mi manada,
como un familiar en la lejanía,
como un pedazo de mi alma.  

sábado, 15 de febrero de 2014

ADIOS CUPIDO

Mira Cupido
tus alas ya han partido
y para todos esos enamorados
tus flechas cayeron en el olvido.

Ya no habrá más rosas
ni bombones ni joyas
ni, por supuesto,
más odas de las que enamoran.

Mira Cupido, en ti nunca he creido.
Y me propuse ser quien te contradijo.
364 días de amor
y un 14 de febrero frío.

Ponte en contacto con nosotros

peligroversossueltos@gmail.com